Sutileza
La forma más rápida de obtener una respuesta negativa (e inútil) es hacer una pregunta directa.
¿Tiene problemas en el trabajo? ¿Tomas drogas? ¿Mantienes relaciones sin protección?
Otra reflexión del manual «Cómo no cagarla interrogando a un paciente»
jaja, no me extraña. Si me hacen esas tres preguntas por supuesto voy a decir que no. Ahora si me preguntan: te hace una cañita con los amiguetes, ya te has tirado a la rubiales/el rubiales, o como mola el nuevo curro… quizá me deje camelar y sea sincera jajaja. Que te imagino haciendo de House con los pacientes.
lapatachunga
22 Feb 10 at 06:52
jajaja, lo siento por repetir comentario, pero es que me muero de la curiosidad. Acabo de ver que se ha pasado de «callados como putas» a «un temerario» y deseo ver si hay más. Me encanta tu blog por lo cuidado que lo tienes.
lapatachunga
22 Feb 10 at 06:54
¡Estupendo consejo! De todas formas, hay muchas profesiones en las que unas nociones, aunque pequeñas, de psicología no vendrían nada mal. 😉
Camarada Bakunin
22 Feb 10 at 09:30
A mi me gusta lo de «pregunta lo mismo de forma distinta en distintos momentos» que me dijeron en las clases del viernes, y que está bien para ir entreviendo lo que realmente no te quiere contar. Eso sí, cada vez me dan más ganas de que nos pongan un cursillo de psicología o unas clases con los del KGB para interrogatorios…
Bea
22 Feb 10 at 09:38
¿Usté bebe? Bebo lo normal, usté sabe, un carajillo pa empesá er día, que no veah la peshá de curro, una servesita con una tapita ar mediodía, un par de copichuelas de vinito con la parienta mientras vemos er telediario, un whiskito tranquilito antes de cenar mientras veo la tele, mi servesita pa ver er partío…
Sophie
22 Feb 10 at 13:45
Para mí los médicos como cuando iba al cura,… uff, ya no me acuerdo si mentía o decía la verdad. Pero la Seg. Social no está para gilipolleces.
Marta
22 Feb 10 at 15:31
El abuelo de una amiga mía siempre me dice que los mejores médicos son los veterinarios, que saben lo que les pasa a los animales sin tener que preguntarles nada.
jajajaj, Ains, el comentario de Sophie está taaaaan a la orden del día…
pito...TO!!
22 Feb 10 at 19:01
Me uno a Sophie y sumo un:
-¿Tiene alguna enfermedad?
-No, no ¡qué va!
-Pero… ¿no toma ningún medicamento?
-Ah, claro que sí, hija: la pastillita de la diabetes, lo del colesterol, unas cosas para la tensión…
-¿Y no recuerda el nombre de ninguna?
-No, es que eso lo lleva mi mujer, ¿sabes?
Emtochka
22 Feb 10 at 20:09
pito…TO!! un profesor siempre dice que los veterinarios somos más listos porque nuestros pacientes nunca dicen nada =)
Si a eso le añades que nunca es culpa de los dueños («Yo le he comprado el pienso que me dijo, pero la vecina me dio el pienso de su gato y mi hijo se equivocó y blablabla»)… Se resume que simplemente es distinto.
(mentira, ¡molamos más! =P)
Bea
22 Feb 10 at 21:09
Yo suelo añadir el ¿verdad? dándolo por supuesto. ¿Bebe usted mucho, verdad? Bueeee…un carajillo por las mañanas, un sol y sombra al mediodía, 2 cervecitas de aperitivo, medio litro de vino en la comida, un coñac de sobremesa, una copa por la tarde y si salgo algo más.
Suele ser infalible.
dra jomeini
22 Feb 10 at 21:29
@lapatachunga:
Más que de House, con los pacientes a veces hay que jugar a ser Sherlock Holmes: entre los que no te dicen las cosas porque no se dan cuenta («Vamos a ver, michica, ¿tan difícil es que me digas si te duele como si te apretasen o como si te pinchasen?») y los que sospechas que te la quieren meter doblada («Es que el aire acondicionado del trabajo me da dolor de cabeza: ¡necesito la baja!»), hace falta tener mucho tacto. No sea que con el segundo te pases de guay y te comas ese meningioma como una pelota de tenis que tenía 😳 Pero sí, la idea es la que tú has dicho: hacer las preguntas de lado, como el que no se da cuenta… y jugar con los silencios.
Y gracias por el piropo al blog 😉 Hago lo que puedo con el poco tiempo de que dispongo… 😳
@Camarada Bakunin:
Completamente de acuerdo. Nosotros desgraciadamente tenemos que aprenderlas por ensayo y error, así que siempre viene bien escuchar a veteranos como la Jomeini 🙂
@Bea:
Ese es uno de los trucos. Otro es hacer preguntas trampa: «Así que le pusieron antibiótico… ¿cuál era, se acuerda? – Ay, no sé… – ¿Rivastigmina, amoxicilina, diclofenaco, molsidaín? – ¡Eso, eso, molsidaín! – Vale, ya lo anoto… 🙄 «. Eso sí: como el paciente se huela que vas a pillarle… date por jodido, que no vas a sacar más información que la de las analíticas 😳
Así que yo voto por el cursillo del KGB 😀
@Sophie:
jejejejeje Mitiquérrimo 😀 Cuando responden lo de «lo normal», yo ya me echo a temblar. Pero bueno, es como lo de «¿Y cuánto hace que viene teniendo estos dolores? – ¡Uf, un montón! – ¿Cuánto es un montón: dos años, dos meses…? – Sí, como un mes diría yo…». Pero bueno, luego ya aprendes a entender claves, como que «enfermedad» significa «cáncer» («¿Y alguna cosa más? – No, nada; bueno, sí, la enfermedad de la próstata»). Creo que obtener la historia es la parte que más me gusta del trato con el paciente 😀
@Marta:
Ojalá todo el mundo pensase así… Pero luego hay cada caso la mar de gracioso 😀 Que yo me planteo: ¿por qué se creen que el médico pregunta, por curiosidad, o para obtener datos relevantes? ¡Coño, pues no me mientas! (Ver respuesta a Emtochka)
@pito…TO!!:
Exacto: veterinarios y pediatras, ambos tienen que ingeniárselas con pacientes que no sueltan prenda y amos/madres ansiosos. ¡Pobres!
@Emtochka:
Calla, calla… que eso me pasó en mi primera historia. Un ricachón (ojito cómo le llevas la contraria, que te la juegas), en plena fase maníaca, que yo no sabía cómo coño dirigir la entrevista, y que no sufría de ninguna enfermedad («¿Es usted diabético? – ¡No, no! – ¿Hipertenso? – Tampoco. – El colesterol, la grasa, ¿se lo suele mirar el médico? – Nada, todo normal.»). Eso sí: el cabrón tomaba medio medimécum. Obviamente, incluido Dianben, Seguril y Cardyl. Conclusión: como dice House, no te fíes de los pacientes.
@dra jomeini:
Coño, doctora, esa es muy buena… Me la apunto 😀 ¡Gracias!
EC-JPR
23 Feb 10 at 00:35
A partir de esta y la entrada de «Anamnesis», creo concluir que yo sería un pésimo paciente. El resultado de ser hijo de médico y no haber consultado a otro más que en contadísimas ocasiones.
Que por lo menos a los médicos les enseñan a describir síntomas y supongo que por ello vean tan «fácil» hacerlo. Pero a nosotros nadie nos educa para ser pacientes y no siempre acertamos a dar una descripción.
Dices «¿por qué se creen que el médico pregunta, por curiosidad, o para obtener datos relevantes?» Nada, que yo sé que preguntan para tener anécdotas que contar en sus blogs, que los he pillado. Y teniendo de referencia mi propia profesión preguntona, también puede haber una dosis de curiosidad morbosa y méteme-en-todismo. 😛
En cuanto a usar el «¿verdad?» como coletilla, no digo que no funcione, pero como a mí me hagan una pregunta así con algo que no es verdad, pues de allí ya estuvo que no me sacan más información ni a palos. Que uno tiene dignidad (como sinónimo de mala leche, claro). 🙂
¡Ah, los gajes del oficio! ¡Qué bonitos son!
gt7h1
23 Feb 10 at 01:16
gt7h1: Es que, con los años, uno hace el ojo clínico y ya sabes quien bebe, quien se droga, quien fuma como un carretero aunque no te lo digan. Sólo lo certificas y si te dicen que no, por si acaso, no te crees la respuesta.
Dra Jomeini
24 Feb 10 at 22:00
@gt7h1:
Eso se nota mucho, por eso hay «buenos» pacientes (que te lo explican todo claramente, siguiendo una secuencia y sin irse por las ramas) y «malos» pacientes: los que te desquician, con un dolor que es como que le aprieta o le pincha, no sabe, que no se ha fijado si con las comidas empeora pero tampoco mejora, y que sabe usted, siempre he tenido dificultad para vomitar y yo creo que si pudiera vomitar me quedaría más a gusto, pero tampoco es que tenga náuseas. ¡Argh! 😛
Y por las anécdotas, no te creas que hace falta preguntar: la mayoría surgen directamente 😀
@Dra Jomeini:
Qué bonita (y cara) es la experiencia…
EC-JPR
2 Abr 10 at 13:15