Si es antiguo, es bueno
Much of the time, complementary and alternative medicine isn’t complementary, alternative or medicine. Other than that, the name’s right on the money. Clearly, as a society we feel that some ancient traditions are passé. We are far too sophisticated to gargle with goat urine or submit to bloodletting. Yet why do we yearn for other ancient cures and customs born of the same logic, from an era when most people died young from diseases we’ve since licked?
La mayor parte del tiempo, la medicina alternativa y complementaria no es complementaria, alternativa o medicina. Más que eso, el nombre está justo en el dinero. Claramente, como sociedad nos parece que algunas antiguas tradiciones están demodé. Somos demasiado sofisticados para hacer gárgaras con orina de cabra o someternos a sangrías. No obstante, ¿por qué anhelamos otras antiguas curas y costumbres nacidas de la misma lógica, de una era cuando la mayoría de la gente moría joven de enfermedades que hemos machacado desde entonces?
Christopher Wanjek, Bad Medicine: Misconceptions and Misuses Revealed, from Distance Healing to Vitamin O.
Y, al hilo de esto, un poco de lectura complementaria por cortesía de Sophie: Las falacias más repetidas al hablar de Medicina y pseudomedicina, y Las falacias de la homeopatía. Que vuesas mercedes lo disfruten.
Sólo con leer el título: ¡lo antiguo es bueno! Mira lo antiguo que se ha quedado mi portátil pero que buenecito que es que me sigue aguantando.
Supongo que es encontrar el equilibrio, ni todo lo más nuevo del mundo es lo mejor ni lo antiguo es la panacea.
(También contesto lo que me da la gana bastante independientemente del tema central de la entrada… pero con cariño =D)
Bea
20 May 10 at 13:27
El que dijo eso no sabía que seguimos sometiéndonos a sangrías (policitemia vera y su tratamiento)…
Independientemente de la entrada y en relación con el título (No va a ser Bea la única que conteste lo que le da la gana), yo tenía un novio un poco gilipollas que decía que no leía nada que no tuviera menos de diez años.No hace falta decir que lo dejamos.
Dra Jomeini
20 May 10 at 17:27
La Edad de Oro, el Paraíso perdido. Todo tiempo pasado fue… anterior.
No deja de ser curioso que sociedades como las nuestras, que parecen despreciar la experiencia que dan los años (vean cuánto caso le hacemos a nuestros ancianos o las posibilidades de alguien mayor de conseguir un buen empleo), desvaríen tanto cuando se trata de supuestas «costumbres tradicionales de antigua sabiduría».
Será en parte ese rasgo humano de juzgar retrospectivamente todo a mejor. Antes se vivía mejor. Antes no había tantos problemas. Antes las entradas del blog eran interesantes y entretenidas.
La gente anhela lo antiguo por ignorancia. Ignorancia de la situación real en que vivían los antiguos, sustituyéndola con idílicos (y totalmente irreales) cuadros de supuestas armonías con la naturaleza (aunque no prolongar la vida y morir a la primera infección podría ser más armonioso con la naturaleza, ¿quién soy para juzgar?). O peor aún (algo con lo que tengo que lidiar constantemente en mi profesión), porque se les atribuye conocimientos místicos superiores que nosotros hemos perdido en nuestro afán materialista de tener vidas más largas, plenas y satisfactorias. Pues yo renuncio a ese misticismo y me quedo con ese materialismo.
gt7h1
20 May 10 at 17:41
Gracias por los enlaces, resalao 🙂
¿Qué tal está ese libro? Por la cita tiene buena pinta 🙂
Sophie
20 May 10 at 18:46
Pues sí, pues sí. Como comentó muy bien Yuri, el pasado era una mierda y lo peor es que algunos lo tienen idealizado:
http://lapizarradeyuri.blogspot.com/2010/03/el-pasado-era-una-mierda.html
Shora
20 May 10 at 18:49
@Bea:
Lo antiguo puede ser bueno, lo antiguo puede ser malo. Lo antiguo es antiguo. El problema es sacarse de la manga una relación de causalidad: es bueno porque es antiguo, ¡he ahí el error! El problema es que muchas veces se emplea la antigüedad como un aval per se. El caso de la medicina es el mejor ejemplo: ¿acaso seguimos tratando las infecciones con arsénico? No obstante, sigo respondiéndote junto a la Dra. Jomeini.
@Dra Jomeini:
Por supuesto, doc, pero el que escribió eso, a pesar de ser periodista (sabes que no les tengo mucho cariño), sabía de lo que hablaba. Se refería a las sangrías que se usaban hace siglos, no sólo para tratar enfermedades que desconocían (poli… ¿qué? ¡entonces no sabían ni qué eran las células!), sino cualquier cosa: infecciones, cefaleas… ¡si hasta eran profilácticas! Es como las lavativas, que hoy se emplean para resolver una obstrucción intestinal, pero en tiempos servían para todo (tú que hablas francés, si aún no lo has leído, te recomiendo Le malade imaginaire de Molière).
En cuanto a la antigüedad de los libros, tengo que romper una lanza en favor de tan desafortunado varón: yo también prefiero leer libros con una cierta solera, por la simple razón de que se les supone haber sobrevivido a la selección natural. Lo cual no significa que pueda encontrarme algunos truños: las Novelas Ejemplares son viejísimas y me dejaron absolutamente frío, y el libro del que saco esta cita me parece buenísimo y tiene sólo siete años. Mi punto es que prefiero leer algo que lleve mucho tiempo andando y que haya sido «probado» antes que un bestseller que acaba de salir pero que puede saberme a café de máquina. No sé si me explico 😳
@gt7h1:
Exactamente. Supongo que será sesgo de memoria, pero siempre me han hecho gracia los comentarios de «pues antes»: los que dicen que la juventud está perdida parece que no recuerdan lo que pensaban sus mayores sobre los guateques y el rock-and-roll. Los que creen que ahora los jóvenes salen del instituto sin saber nada se olvidan de que hace cuarenta años esos jóvenes ya llevarían casi un lustro trabajando y se limitarían a escribir su firma y las cuatro operaciones básicas. Y así un largo etcétera.
Un pequeño ejemplo personal de hace unas semanas.
– Información previa: tengo una tía sordomuda que, desde niña (años 50), fue llevada a la capital a un colegio especial para que, a fecha de hoy, pueda ser una persona completamente autónoma.
– Hecho: familia a la hora de la comida, noticia en la televisión de un esquizofrénico que atropella a dos personas.
– Comentario del pater familias: «Yo no digo nada… pero antes no había este tipo de problemas».
– Comentario del pequeño cabrón (¡presente!): «Claro: antes se les escondía en casa para no dañar la honra, o se les empaquetaba para un psiquiátrico para apartarlos de la vista, ¡y arreglado el problema!».
– Réplica: «Qué sabrás tú lo que se hacía o se dejaba de hacer…».
– Pullita de la jefa de la casa: «Y, si no, se les mandaba a un colegio a unos cientos de kilómetros del pueblo».
– Pater familias: [silencio…]
En cuanto a lo del blog, tomo nota 😳
@Sophie:
Tremendo. Te lo recomiendo encarecidamente: son capítulos breves, que se pueden leer en el autobús o donde quieras, escrito con un lenguaje claro y bastante bien fundados.
@Shora:
Tremenda entrada. Desde luego, lo poco que he leído de este blog siempre me ha dejado anonadado: se ha ganado a pulso un hueco en el Reader…
EC-JPR
3 Jun 10 at 14:37